Comidas ideales para el verano: frescas, ligeras y llenas de sabor

El verano no solo cambia nuestra rutina, también transforma nuestra forma de comer. Con el calor, el cuerpo nos pide platos más ligeros, refrescantes y fáciles de digerir. Por eso, hoy te contamos cuáles son las comidas más recomendables para esta temporada, tanto por sus beneficios nutricionales como por su capacidad de hacernos sentir bien cuando el sol aprieta.

1. Ensaladas creativas y completas

El clásico del verano, pero con un giro. Las ensaladas ya no son solo lechuga y tomate. Puedes combinar hojas verdes con frutas (como mango, fresas o sandía), cereales (quinoa, arroz, couscous) y proteínas ligeras (huevo, atún, tofu, pollo o queso fresco). Añade frutos secos y una vinagreta suave para un plato completo, colorido y saciante.

2. Frutas de temporada, mejor frescas (¡o congeladas!)

La sandía, el melón, las cerezas, los albaricoques o los higos son dulces, hidratantes y están en su mejor momento. Son perfectas para media mañana o como postre. Además, puedes congelarlas en trozos para tener snacks helados saludables y sin azúcar añadido.

3. Sopas frías: gazpachos, salmorejos y más

El gazpacho andaluz es una joya nutricional: lleno de antioxidantes, vitaminas y muy hidratante. Pero también puedes probar otras variantes como el ajoblanco, el gazpacho de sandía o incluso sopas frías a base de pepino o remolacha. Se preparan en minutos y se conservan muy bien en la nevera.

4. Pescado a la plancha o en ceviche

Los platos de pescado son más digestivos que las carnes rojas, especialmente si se preparan a la plancha o en formato frío como el ceviche o el tartar. El salmón, el atún o el bacalao son ricos en omega 3 y combinan muy bien con cítricos y verduras frescas.

5. Helados saludables caseros

¿Quién dice que no puedes darte un capricho en verano? Puedes hacer helados caseros con yogur natural, frutas congeladas y un toque de miel o dátiles. Basta con triturar todo y congelar en moldes. ¡Deliciosos y sin remordimientos!

6. Bebidas naturales y mucha agua

El mejor aliado en verano es la hidratación. Aparte del agua, puedes preparar infusiones frías, aguas saborizadas con rodajas de frutas o batidos verdes suaves. Evita los refrescos azucarados y el exceso de alcohol, que deshidratan y aportan calorías vacías.

El verano es la época ideal para disfrutar de comidas más ligeras, frescas y naturales. Aprovecha la riqueza de la huerta, hidrátate bien y experimenta en la cocina con recetas sencillas pero sabrosas. Tu cuerpo (y tu digestión) te lo agradecerán.

¿Tienes algún alimento favorito en esta época? ¡Cuéntanos en los comentarios!

Deja un comentario