El clásico del verano, pero con un giro. Las ensaladas ya no son solo lechuga y tomate. Puedes combinar hojas verdes con frutas (como mango, fresas o sandía), cereales (quinoa, arroz, couscous) y proteínas ligeras (huevo, atún, tofu, pollo o queso fresco). Añade frutos secos y una vinagreta suave para un plato completo, colorido y saciante.